En días pasados FIFA anunció el listado de referees que actuarán como árbitras principales y asistentes en el Mundial Femenino Sub-17 que se celebrará en Marruecos del 17 de octubre al 8 de noviembre de este año.
En lo que respecta a las jueces que aportará la CONCACAF para esta competición aparece el nombre de Vimarest Díaz como árbitro de República Dominicana, quien fungirá de principal en un trío que conforma con sus asistentes Santa Medina (también de República Dominicana) y Melissa Nicholas (Trinidad y Tobago).
Lo especial de este caso radica en el origen de Díaz, quien había estado previamente en el Mundial de la categoría y rama celebrado el año pasado precisamente en Quisqueya: nació en Caracas el 16 de octubre de 1996 y fue jugadora de clubes como UCV FC y Atlético Venezuela en los torneos femeninos de la FVF, con pasantía en el Atlético Bucaramanga colombiano.
Su talento como atacante la llevó a las selecciones juveniles venezolanas, donde dejó una huella imborrable. El 3 de diciembre de 2015, en el estadio Urbano Caldeira “Vila Belmiro” de Santos, Brasil, hogar del mítico Santos FC, Díaz marcó el gol decisivo que clasificó a Venezuela a su primer Mundial Sub-20 femenino.
El partido, correspondiente a la última jornada del cuadrangular final del Sudamericano Sub-20, enfrentó a Venezuela contra Colombia. Ambos equipos, junto a Brasil y Argentina, llegaban con dos puntos, en una lucha cerrada por el boleto al Mundial de Papúa Nueva Guinea en 2016. Las neogranadinas se adelantaron con un gol de Juliana Ocampo al cierre del primer tiempo.
El combinado vinotinto, dirigido por José Catoya, igualó al minuto 63' con un tanto de Idalys Pérez y en el 83', un saque de esquina encontró la cabeza de Díaz, quien anotó el 2-1 que aseguró la victoria y la histórica clasificación. Este logro consolidó el avance del fútbol femenino venezolano, que ya había brillado en la categoría Sub-17 (dos títulos sudamericanos y sendas clasificaciones mundialistas).
Años más tarde, luego de su trayectoria como jugadora en los clubes arriba mencionados, Díaz emigró a la República Dominicana, probablemente en el contexto de la diáspora venezolana provocada por la crisis en el país. En Quisqueya, encontró una nueva vocación gracias a Irasema Aguilar, jefa del Departamento de Árbitros de la Federación Dominicana de Fútbol, quien la animó a probar el arbitraje. Así iniciaría su andar como referee en el balompié de ese país antillano, con trabajos tales que la llevarían a ganarse el escudo FIFA y ser árbitra por Dominicana en torneos internacionales (también obtuvo la nacionalidad de su país de adopción).
En 2024, participó como árbitra de soporte en el Mundial Sub-17 celebrado en Santo Domingo y Santiago. También dirigió la final de la CONCACAF U-17 Femenina 2024 en México (0-4, México vs. Estados Unidos), partidos de la CONCACAF Nations League C, como el del 9 de octubre de 2024 entre Islas Vírgenes Británicas y San Cristóbal y Nieves, el Campeonato Sub-15 Femenino en Aruba, el Campeonato Sub-14 de la CFU en Antigua y Barbuda, y encuentros de la CONCACAF W Champions Cup. Su filosofía de “invisibilidad”, inspirada en la idea de que un buen árbitro pasa desapercibido, refleja su compromiso con la imparcialidad y el aprendizaje continuo.
De marcar un gol histórico para la Vinotinto a representar a la República Dominicana en un Mundial, Vimarest Díaz encarna la resiliencia y el talento de una mujer que ha transformado desafíos en oportunidades, dejando su marca en el fútbol internacional.
Texto: Edfran Jesús Chirinos.